Tonalá se encuentra perdido en la ingobernabilidad, la administración de Jorge Vizcarra se ha dejado absorber por tratar de limpiar su imagen pero todos esos intentos han sido inútiles, lo único que se ha logrado es desperdiciar el dinero en publicidad y destituciones de personal que solo traen al municipio gastos innecesarios, esto solo significa tratar de maquillar el problema.
Retomar el gobierno es difícil ya que resarcir los daños sociales que se cometieron es realmente complejo, y la única salida que tendrían los Blanquiazules es la llegada de cientos de miles de nuevos vecinos en los últimos 15 años solo así podrían recuperar Tonalá.
Pero dichos habitantes demandarían servicios y habrá que ver si las autoridades correspondientes se encontraran preparados para satisfacer dichas demandas de servicios.
En el 2006 equivalía a gastar 980 pesos por persona, y esto se reduciría a 500 pesos con esa cantidad se tenía que brindar servicios, realizar obra pública y promover al Municipio, incluyendo los rubros de cultura y deporte, para una población que sufre los mayores rezagos de la zona metropolitana.
El gobierno Panista realmente si tiene un reto, el tratar de desaparecer todos los problemas del municipio, y si realmente pretende lograr la presidencia del municipio de tonalá deberá arrancar de la memoria del tonalteca el sin numero de errores cometidos como escoltas con antecedentes penales, amenazas entre funcionarios, un atentado contra la vida del síndico, el asesinato del director de Mejoramiento Urbano, la red de protección a narcotienditas, la operación de máquinas tragamonedas, la venta de plazas a funcionarios y demás.
La agregación de los anteriores desaciertos han llevado a que el presidente en turno, (no digo el nombre por que hasta la fecha no se sabe cual es el presidente de Tonalà, parece un juego de niños que se pelean por las canicas) pretenda borrar el daño a la ciudadanía con un bombardeo de obras publicas innecesarias, que solo incrementan la deuda del municipio a mas del 100 por ciento. Provocando que las empresas calificadoras bajaran el nivel de credibilidad del Ayuntamiento, en tanto que la Secretaría de Hacienda colocó al Municipio, proporcionalmente, como el más endeudado a nivel nacional.
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