La economía mexicana enfrentará un proceso de escasez de divisas durante el próximo año, ya que las estimaciones realizadas por los especialistas revelan que por los efectos que producirá la recesión mundial habrá una baja significativa en las actividades que generan la mayor parte de los ingresos en moneda extranjera para el país.
De acuerdo con las proyecciones de los especialistas financieros, solamente por concepto de exportaciones el país podría dejar de percibir hasta 31 mil millones de dólares durante el siguiente año.
Las estimaciones para la Inversión Extranjera Directa dejan entrever una contracción mayor que mil 100 millones de dólares, mientras que las proyecciones para las remesas monetarias señalan que la baja mostrada durante el presente año se recrudecerá en 2009.
La debilidad de los mercados externos y de la economía mundial se presenta como el principal obstáculo que enfrentará el país, según el grueso de los analistas del sector privado; así, entre los grupos financieros ha cobrado relevancia como una amenaza significativa para el crecimiento de la economía la disminución de divisas provenientes del exterior.
Así, se observa que en septiembre de 2007 sólo 2 por ciento de los especialistas encuestados por el Banco de México manifestaba que la baja en las divisas que ingresaron del exterior podría convertirse en un obstáculo para el crecimiento, mientras que en el presente año representó el 5 por ciento de las respuestas totales; lo anterior repercute en lo siguiente:
Retroceso en las exportaciones
Debido a la baja en la actividad económica que se presentará de manera contundente durante 2009, se estima una disminución en la demanda mundial por energéticos, situación que ha provocado que los especialistas proyecten una reducción de 18.8 por ciento en el valor de las exportaciones mexicanas de petróleo para el próximo año.
Esta caída provocará una baja significativa en la entrada de divisas que, al cumplir con las proyecciones actuales, podría convertirse en una pérdida superior a los 10 mil 600 millones de dólares.
Tal situación tendrá amplias repercusiones para los ingresos en moneda extranjera, toda vez que representa la segunda fuente de divisas más importante para el país, sólo por debajo de los recursos obtenidos por las exportaciones no petroleras.
A lo anterior debe sumarse que en el siguiente año se intensificará el debilitamiento de las exportaciones no petroleras, ya que las estimaciones para 2009 señalan una disminución de 2 por ciento anual en el valor total.
De esta manera se espera que la reducción de las exportaciones no petroleras generé un ingreso de divisas por 18 mil 500 millones de dólares, con lo cual, estos ingresos quedarían muy rezagados del avance de 8.1 por ciento anual que se espera para 2008.
El debilitamiento del intercambio comercial para el próximo año, generará que se incremente el saldo negativo de la balanza comercial para ubicarse en 18 mil 394 millones de dólares en 2009, con lo cual aumentaría el déficit comercial en cuatro mil 666 millones de dólares, respecto del cierre de el presente año.
Menores ingresos petroleros
Mientras tanto, se espera que las exportaciones de productos petroleros caigan 18.8 por ciento anual el próximo año, lo que contrasta con el aumento de 29.4 por ciento anual que estiman los especialistas para el cierre del presente año, toda vez que las ventas al exterior de petróleo sumaron 43 mil 571 millones de dólares de enero a septiembre.
Por tal motivo la caída en las exportaciones petroleras cobra relevancia, toda vez que es un factor de estabilización ante el creciente déficit comercial que se agudizó a lo largo del año, debido al debilitamiento que arrojaron las exportaciones manufactureras, además de un aumento en las importaciones.
Como resultado de la recesión económica y de las turbulencias financieras, se estima que el flujo de Inversión Extranjera Directa esperada para el próximo año disminuya más de mil 100 millones de dólares.
De acuerdo con las proyecciones realizadas por los analistas del sector privado, se infiere que durante el presente año la Inversión Extranjera Directa mantendrá la tendencia que mostró en 2007, ya que esperan que el flujo de inversión cierre el año en 19 mil 885 millones de dólares, lo que permitirá enfrentar de mejor forma la contracción que se espera para 2009.
Menores Remesas
Las divisas obtenidas por concepto de remesas familiares no han mantenido el mismo comportamiento, ya que durante el último año se observó una paulatina disminución en su envío. De esta manera, se observa que las remesas acumulan una caída de 3.70 por ciento anual, al arrojar un monto por 17 mil 526 millones de dólares, el mayor retroceso de que se tiene registro.
La caída en el ingreso de divisas tendrá importantes consecuencias en la economía nacional, ya que la oferta de moneda extranjera influye en la cotización del peso, además de que la caída en las exportaciones de petróleo reducirá los ingresos gubernamentales.